Harta.

Estoy harta. Harta de él, de que diga algo y que la gente diga que está mintiendo y yo no sé que creer, harta de que cambie en un segundo de encantador a insoportable, estoy harta de que me mienta y no me diga nada. No puedo más, quiero subirme a la montaña más alta que encuentre y gritar hasta quedarme sin voz y llorar hasta que me quede sin lágrimas. Quiero que me dejen todos en paz, que no me pregunten porque estoy así, porque lloro sin poder parar. Quiero conocer gente nueva, empezar de cero, sin que nadie me juzgue por cosas que no saben de que van, gente que me escuche y me comprenda, que me abracen fuerte cuando esté mal y no pregunten el por qué. No quiero seguir aquí, en este sitio, me quiero ir lejos, muy lejos, un sitio donde pueda ser yo, sin complicaciones, sin tener que dar explicaciones de lo que hago o de lo que siento.

Ya es tarde, ahora él está con una chica, puede que no vayan en serio y sea solo un rollo de adolescentes pero no lo dijo, me mintió, se calló la boca. Se supone que, al menos, somos amigos. Sabe que puede contar conmigo, se lo dije, que iba a estar ahí siempre, pase lo que pase, si tenía algún problema o le pasaba algo me lo podía contar, aunque el problema sea una chica, yo iba a estar ahí, porque sé que no vamos a estar juntos pero quiero que sea feliz aunque sea con otra. Pero no ha dicho nada, ha preferido creer lo que dicen los demás en vez de escucharme y creerme. Así que no voy a decir nada más, no voy a hablar con él.

Este curso, cuando empecemos el colegio, si sigue en el mismo me lo pensaré, pensaré si hablar con él o no, pero como mucho amigos y ya. Lo tengo demasiado en mente, no quiero cambiar de opinión.

Besitos.